Existen muchas maneras de descansar, casi tantas como personas. Postura, horas de sueño, tipo de colchón o
almohada son entre muchos, elementos que marcan la manera de dormir de cada persona.
Pero hay algo en común: estamos diseñados para realizar la mayor
parte de nuestra actividad durante el tiempo en el que hay luz solar,
momento en el que nuestro cuerpo obtiene unos niveles de energía
mayores, reservando las horas de oscuridad para nuestro descanso.
Siguiendo ese patrón general, existen ciertas peculiaridades por las que
hay personas que madrugan más y otras que alargan la hora de meterse en
la cama.
Según Odile Romero, neurofisióloga
jefa de la unidad multidisciplinar del sueño del Hospital Vall d’Hebron de Barcelona, todos tenemos un reloj biológico que nos condiciona para mantener los
ritmos circadianos,
es decir, repetir ciertas conductas todos los días a la misma hora como
puede ser la de dormir. Este mecanismo se encuentra en el cerebro y es
similar en todas las personas, aunque con matices.
¿Eres Alondra o Búho?
Durante mucho tiempo diferentes estudios han investigado los patrones
de sueño en los individuos, llegando a la conclusión de que había dos
tipos de personas, aquellos que encuentran momento físico y psicológico
óptimo durante las primeras horas de la mañana, por lo que son más
propensos a madrugar, y otro grupo de personas cuyo momento óptimo se da
por las noches, lo que hace que su hora de irse a dormir se prolongue. A
los primeros los científicos los denominan como
“alondras” y los segundos son clasificados como
“búhos”.
Esta clasificación podría cambiar en breve. En un reciente estudio llevado a cabo por el biólogo
Arcady Putilov,
se mantuvo a 130 personas despiertas durante 24 horas y se compararon
los resultados obtenidos en diferentes test y su comportamiento con los
realizados la semana anterior al estudio. Los resultados mostraron que
había dos clases de personas,
unas que se mantienen letárgicas todo el día y
otras que tienen más energía, estos dos nuevos cronotipos “vagos” los primeros y “activos” los segundos
.
En realidad, los 4 nuevos cronotipos, los 2 conocidos y los 2 nuevos,
se dividen de una forma muy semejante. 25 de las 130 personas
consultadas manifestaban tener mucha energía tanto por el día como por
la noche, mientras que unas pocas más (32) señalaban que se sentían
igual de cansados las 24 horas de la jornada.
La importancia de un buen descanso
Independientemente de la clasificación en la que se englobe cada
persona, lo realmente importante es un sueño de calidad. Somos cada vez
más conscientes de la importancia de realizar un descanso adecuado para
evitar trastornos ligados a la falta de sueño.
Para lograr un buen descanso podemos empezar por pensar en uno de los
puntos clave, el colchón. Un colchón de calidad, que se adapte a ti y
que cubra tus necesidades y preferencias.
Colchonight te ofrece todas las opciones de confort para que tu descanso
se perfecto y saludable.
Elige el colchón y la almohada más adecuada, y levántate con las energías renovadas y sin dolores de espalda al levantarse.